MÁS PLANES POR HACER
Fue así como el gerente continuó haciendo planes para deshacerse de cada cliente que fuera lento o habitual y no comprara nada consistente. Sabía que Agustín ya no lo ayudaría, entonces no le importó hacerlo todo a solas. Lo que no esperaba que sucedería es lo que vino después.
Una mañana después, a casi una semana del acontecimiento donde Julia fue expulsada, apareció la policía en la puerta del local, justo antes de que esta abriese. Cuando Agustín vio eso no pudo evitar sentir miedo. No entendía qué estaba pasando y no dejaba de hacerse preguntas, aunque estas no fueran del todo contestadas.